Selección de variedades para nuestro cultivo

La selección es un recurso poco utilizado hoy en día entre los cultivadores de cannabis. Tal y como hemos leído alguna vez, el concepto de clon élite proviene de las mejores genéticas logradas con diferentes plantas de cannabis.

Podemos definir estos clones élite como plantas elegidas y minuciosamente seleccionadas entre muchas variedades, con características notables en su aroma, su vigor, en su productividad y en su resistencia a cualquier tipo de estrés.

En el mundo del cannabis vamos a encontrar gran cantidad de los denominados clones élite. Algunos ejemplos son el UK Cheese (1988), el NL#5 Hazeo el Northern Lights(1983/84).

Con el paso de los años, los cultivadores aprenden a identificar estas especies que destacan por su calidad. A medida que vamos experimentando y aprendiendo, adquirimos un criterio para decidir qué genéticas cultivar en nuestro jardín, dependiendo de las patologías que queramos aliviar, o simplemente porque nos atraiga su aroma, su potencia o su sabor.

De este modo, muchos cultivadores eligen cruzar las genéticas de cannabis y obtener así sus propios cruces domésticos sin tener que invertir tanta cantidad de dinero. Así, la selección y reproducción de diferentes tipos de plantas se convierten en algo fundamental si queremos experimentar y aprender de cruces entre distintos tipos de cannabis.

Los criterios de selección más relevantes

Para comenzar, debemos tener en cuenta el objetivo para el que se va a cultivar. Esto te permitirá luego el descarte de las plantas que no presenten las características que estás buscando.

Las características más deseadas por los cultivadores son: los niveles de terpenos y cannabinoides, el crecimiento y vigor que desarrolla la planta, la cantidad de resina que genera, el tiempo de floración, la densidad de los cogollos o la potencia.

Si lo que buscas es una alta producción en vuestro cultivo, busca genéticas que tengan estos rasgos o con gran potencial en este sentido. Para ello, debemos prestar mucha atención al desarrollo de esta planta. Debemos tener en cuenta la estructura de la misma, el vigor con el que crece, su forma de ramificación y su espacio intermodal. Así mismo, tendremos en cuenta el porte de la planta, la consistencia y el grosor de los tallos o la tolerancia a los nutrientes ocupados.

Si lo que buscas son plantas destinadas a la cría, debes saber que muchas veces una planta de calidad no se traducirá necesariamente en un parental de calidad. De hecho, puede ser que no trasmita los rasgos propios y deseables a su descendencia, por lo cual se aconseja el uso de test de progenie y, por supuesto, la pre-selección de machos.

En el caso de que vuestra prioridad sea una planta de calidad para vuestro consumo habitual, debes tener en cuenta los quimiotipos, ya que de esto dependerá que tus plantas tengan las características deseadas. El quimiotipo, o fenotipo, se refiere a las diferencias individuales que tiene una planta en su composición química respecto a otras.

Podemos encontrar plantas de cannabis con quimiotipos predominantes en CBD, TCH y otros cannabinoides. Estas diferencias son las que nos van a permitir descubrir el carácter psicoactivo y organoléptico.

El objetivo final

Este objetivo será el que dicte los criterios de selección. Tenemos que ser meticulosos a la hora de seleccionar o descartar las plantas que comiencen a presentar problemas o características que no deseamos. Debemos deshacernos de forma inmediata de todas aquellas plantas que muestren problemas de crecimiento, estructura no deseable, excesiva sensibilidad a plagas y enfermedades que pueden presentarse en el cultivo como la araña roja, los pulgones, los trips, los hongos o los virus.

Si tenemos en cuenta todos los factores mencionados anteriormente, obtendremos ejemplares con un adecuado rendimiento durante nuestro cultivo.

Genotipo/Fenotipo

Cuando seleccionamos una planta, estamos seleccionando genotipos, no fenotipos.

El fenotipo de las plantas es la expresión conjunta de su genotipo dependiendo del entorno en el que haya crecido. Si bien una planta puede mostrar un fenotipo determinado con nuestras condiciones de cultivo, esta misma podría mostrar otro diferente en otro entorno.

Con esto queremos decir que una planta puede desarrollar su mayor potencial con unas características de cultivo determinadas y no tiene por qué tener los mismos rasgos si la cultivamos en condiciones diferentes.

Por lo tanto, selecciona las genéticas, atrévete a experimentar y busca encontrar con tus cruces esta estabilidad genética tan deseada. Una planta de genética élite puede estar escondida dentro de cualquier semilla ¡tenlo en cuenta!