Cómo la inteligencia artificial puede beneficiar a los cultivadores de cannabis

La integración de herramientas de inteligencia artificial en el cultivo de cannabis tiene el potencial de mejorar enormemente la eficiencia y productividad de cualquier plantación. Las pizarras blancas y las hojas de cálculo de Excel son cada vez más cosas del pasado; y con plataformas basadas en la nube e impulsadas por IA, se puede lograr el análisis y la precisión necesarios para triunfar en un sector tan competitivo como es el del cannabis.

Según un análisis reciente, se prevé que el mercado mundial del cannabis alcance los 82.300 millones de dólares en 2027. Este crecimiento está impulsado por la creciente legalización, el aumento de las aplicaciones medicinales y la cada vez mayor aceptación social de la marihuana. Y está creando una gran demanda de productos de alta calidad. Al utilizar soluciones impulsadas por inteligencia artificial, los cultivadores pueden asegurarse de producir mejores plantas, mientras eliminan muchos de los desafíos de cultivar cannabis.

Y es que el cultivo de marihuana es una habilidad multifacética que requiere un alto nivel de precisión y atención al detalle. De hecho, la belleza de este arte reside en cierta forma en su complejidad. Pequeños ajustes en el entorno de cultivo pueden significar grandes beneficios cuando llegue el momento de la cosecha. Es un espacio para la creatividad calculada para obtener rendimientos ideales en condiciones específicas.

Sin embargo, ajustar el proceso hasta que sea perfecto implica mucho trabajo de registros, cálculos y análisis. Estos detalles meticulosos son casi imposibles de evaluar sin introducir el aprendizaje automático en el cuarto de cultivo. Y a medida que estas dos esferas están en la cúspide de una convergencia revolucionaria, los cultivadores recurren a herramientas digitales e inteligencia artificial (IA) para ayudarlos a optimizar la producción y aumentar el rendimiento.

Amnesia Auto x Amnesia Haze

Amnesia Dream XL Auto

La versión automática de la Amnesia Haze es una variedad resistente a plagas que puede funcionar como autofloreciente o como fotodependiente de floración rápida, que es lo que más nos gustaría ver en una Amnesia Haze. Igual de aromática y potente que su progenitora, pero sin lastre excesivo de Ruderalis.

Algoritmos de aprendizaje automático basado en sensores

Por ejemplo, existen plataformas tecnológicas que utilizan algoritmos de aprendizaje automático para analizar datos de sensores ambientales colocados en una instalación de cultivo y que pueden monitorizar varias métricas, como temperatura, humedad o niveles de luz, brindando a los cultivadores información en tiempo real que puede ayudar a optimizar las condiciones de crecimiento.

Al utilizar estas plataformas, los cultivadores pueden obtener una comprensión detallada del entorno de sus cultivos y ajustarlo en tiempo real para garantizar condiciones óptimas, evitando problemas comunes como el riego excesivo, que puede provocar moho y hongos, o una nutrición insuficiente, que puede impedir el crecimiento. La automatización no solo aumenta la eficiencia, sino que también reduce el riesgo de error humano, lo que resulta en una producción de cultivos más consistente y confiable.

Visión artificial para sustituir los ojos del cultivador

Además de los sensores ambientales, los cultivadores también están utilizando tecnología de visión artificial para rastrear el crecimiento de las plantas e identificar problemas potenciales con anticipación. Mediante el uso de cámaras y algoritmos de aprendizaje automático, se pueden detectar rápidamente anomalías como plagas o deficiencias de nutrientes, lo que permite una intervención más rápida.

La tecnología de visión artificial es particularmente útil en el cultivo de cannabis porque puede ayudar a identificar cambios sutiles en el crecimiento de las plantas que podrían no ser visibles a simple vista. Por ejemplo, un sistema de visión por computadora puede detectar diferencias mínimas en el color o la forma de las hojas que podrían indicar un problema.

También robots móviles equipados con cámaras conectadas a IA pueden recorrer los pasillos de los invernaderos de cannabis por la noche, escaneando las plantas con imágenes espectrales. La IA convierte estos escaneos en un modelo 3D de cada planta y luego combina esa imagen 3D con datos ambientales para generar un informe de progreso que evalúa las tasas de crecimiento, los niveles de thc, los compuestos cannabinoides, la posible aparición de enfermedades, la presencia de plagas y mucho más.

Modelos predictivos mediante IA

La IA también se está utilizando para desarrollar modelos predictivos que puedan pronosticar el rendimiento de los cultivos en función de diversos factores, como los patrones climáticos y las condiciones del suelo. Estos modelos pueden ayudar a los cultivadores a predecir los mejores momentos de siembra, ventanas de cosecha e incluso las cepas que tienen más probabilidades de prosperar en un entorno específico, permitiendo optimizar los calendarios de cultivo, especialmente durante los meses más fríos, cuando producir cosechas se vuelve más difícil. 

Una de las ventajas clave del uso de la IA en el cultivo de cannabis es que permite un enfoque más basado en datos para la toma de decisiones: al analizar grandes conjuntos de datos, los cultivadores pueden identificar patrones y tendencias que podrían no ser evidentes a simple vista. Esto puede ayudarles a optimizar sus procesos de producción y aumentar el rendimiento.

Gelato x Zkittlez x Ruderalis

¡Nueva variedad! - Runtz Auto

Una genética resistente y robusta, todoterreno, que proporciona unos 150gr/planta en exteriores y sorprende con hasta 500gr/m2 en interior de cogollos resinosos y de un exuberante verde brillante. Con un sabor confitado e intenso, Runtz Auto proporciona un efecto eufórico perfecto para combatir la melancolía, que al cabo de un rato deriva en una experiencia sedante ideal para levantar el ánimo.

Chatbots para un mayor conocimiento

El autocultivo doméstico ya no es un misterio ni está reservado a cultivadores experimentados. Herramientas populares de inteligencia artificial como ChatGPT pueden mostrarte una guía completa paso a paso sobre cómo empezar a cultivar tus propias plantas de cannabis con un simple mensaje. Pruébalo tú mismo preguntándole a la IA «pasos para cultivar cannabis en casa» y verás lo que queremos decir.

Lo mismo ocurre con la búsqueda de consejos. Esta información en realidad se obtiene de la creciente base de conocimiento sobre el tema previamente compartida on-line, pero sin necesidad de ir navegando por innumerables páginas y recursos. Ahora es más fácil que nunca para el usuario medio acceder a información sobre las últimas tendencias y consejos para el cultivo de cannabis, tanto en interior como en exterior.

Sistemas domésticos autónomos

También existen marcas que ofrecen tecnologías de cultivo automatizado para uso doméstico en pequeños espacios, que brindan a los cultivadores la libertad de reducir costes y al mismo tiempo generar altos rendimientos de cannabis con el mínimo esfuerzo.

Estos sistemas impulsados ​​por inteligencia artificial (IA) permiten que cualquier persona, desde consumidores promedio hasta cultivadores sin experiencia (incluidos padres, ejecutivos, atletas, jubilados…) tenga la capacidad de cultivar una o varias plantas de cannabis sin requerimientos de atención constante ni gran espacio disponible; y combinan tecnologías de inteligencia artificial con automatización e hidroponía para crear la experiencia de cultivo más eficiente y efectiva posible.

Además, con la ayuda de una aplicación, el microcultivo puede controlarse y monitorizarse desde cualquier lugar mediante un dispositivo móvil. Son los llamados ‘growbox’, pequeños armarios inteligentes de cultivo que puedes colocar en el salón o la cocina de tu casa como un electrodoméstico más y que están cosechando mucha popularidad en EE. UU. o Canadá. Puedes encontrar marcas como Seedo, Annaboto, Grobo, Leaf o Linfa, por solo citar algunas.

Estos dispositivos se parecen a mini-neveras, algunas herméticamente selladas, cuentan con filtros de carbón incorporados, climatización automatizada, un sistema de iluminación LED de espectro completo que se ajusta automáticamente para mantener una distancia óptima de las plantas, así como un sistema de dispensación de nutrientes, cartuchos incorporados para liberar CO2 durante la fotosíntesis y una cámara interna para monitorizar sin intervención. Una vez que las plantas están completamente desarrolladas y listas para ser cortadas, algunos de estos sistemas también se convierten en un sistema inteligente de secado poscosecha.

Todo está controlado y gestionado por un software de inteligencia artificial, que analiza el desarrollo de la planta y toma medidas para optimizar los parámetros de crecimiento en función de su rendimiento. Simplemente, hay que establecer un plan de crecimiento para una variedad de marihuana en particular, sentarse y dejarla crecer de manera totalmente autónoma.

Genética a la carta

Otra aplicación interesante de la IA en el sector del cultivo cannabis es el desarrollo y la personalización de variedades. Tradicionalmente, los criadores se han basado en métodos de prueba y error para crear nuevas cepas con características específicas. Sin embargo, la IA puede acelerar este proceso analizando grandes cantidades de datos e identificando patrones que los humanos tal vez no noten.

Estos motores utilizan marcadores genéticos patentados para identificar variedades de cannabis existentes que podrían cruzarse para crear descendientes aún más potentes, sobre todo orientadas para el mercado medicinal. O particularmente seleccionando terpenos nuevos y únicos que puedan ofrecer sabores y olores nunca antes vistos.

Mediante el uso de algoritmos de IA, los criadores pueden predecir los efectos de diferentes combinaciones genéticas y seleccionar los candidatos más prometedores para su posterior cultivo. Esto no solo ahorra tiempo y recursos, sino que también permite el desarrollo de nuevas cepas con propiedades únicas que satisfagan las necesidades y preferencias específicas de los consumidores.

Conclusión

La inteligencia artificial pronto podría convertirse en una herramienta esencial para los cultivadores de cannabis que buscan aumentar los rendimientos y mejorar la eficiencia de sus instalaciones. Si bien no puede reemplazar el conocimiento y la experiencia de los cultivadores más competentes, puede proporcionar datos e ideas que permiten tomar decisiones de una manera más efectiva.

De cara al futuro, la IA en el sector del cannabis está preparada para continuar su crecimiento y evolución. Y a medida que la tecnología avanza y los algoritmos de IA se vuelven más sofisticados, las posibilidades de innovación y optimización se volverán prácticamente infinitas.