Cómo la iluminación entre el dosel aumenta la calidad y el rendimiento del cannabis

El cannabis adora la luz. Sin embargo, en cultivos de interior esa luz solo es accesible en la parte más alta de la planta debido a la densidad de las hojas. La iluminación intercalada entre el dosel (intercanopy lighting, ICL o IL) ofrece una solución innovadora al distribuir la luz de manera más uniforme, alcanzando no solo la parte superior, sino también las zonas medias y bajas del cultivo. Esta tecnología emergente ha ganado popularidad en los últimos años, con numerosos informes que destacan aumentos significativos tanto en el rendimiento como en la calidad del cannabis cultivado.

Tradicionalmente, los cultivadores han imitado al sol añadiendo iluminación a invernaderos e instalaciones interiores colgando lámparas encima de las plantas desde techos, tejados o gradas (en el caso de cultivos verticales). Pero en los cultivos de interior, las densidades de plantación son altas y pueden causar el sombreado de una planta a otra y en la profundidad del dosel vegetal (la capa superior formada por las hojas y ramas del cannabis).

Por tanto, puede haber una variación en las intensidades de la luz a distintos niveles que puede reducir el proceso fisiológico y bioquímico de la planta, lo que lleva a una reducción de los rendimientos y la calidad, ya que la planta está alcanzando menos de su potencial fotosintético completo. En el mundo del desarrollo vegetal, las hojas son funcionalmente pequeños paneles solares biológicos. Y si has invertido energía en hacer crecer esos paneles solares, pero luego no les das ninguna luz, eso es ineficiente.

Además, las respuestas de las plantas a la luz están muy localizadas. El uso de flujos de luz superiores elevados para fomentar el desarrollo de los cogollos inferiores puede inducir respuestas indeseables en las colas superiores, como revegetación, cola de zorro o cambios de color. Por otra parte, los flujos de luz superiores inferiores dejan los cogollos más bajos poco desarrollados. Por eso, gran parte del cultivo de cannabis se centra en el entrenamiento de las copas, mediante poda o defoliación, para maximizar la penetración de la luz en las ramas inferiores y lograr una cosecha más homogénea.

La iluminación intercalada entre el dosel (ICL) proporciona una solución alternativa a estos problemas al mover la luz directamente hacia el dosel inferior, donde los tejidos fotosintéticos están infrautilizados. De este modo se acelera el desarrollo floral en la parte baja de la planta. El cultivo de cannabis con ICL produce más cogollos de calidad A y menos residuos de poda, lo que aumenta el valor de una cosecha determinada al enriquecer la fracción floral más valiosa. Además, la ICL proporciona una vía para aumentar el rendimiento, al añadir más luz sin correr el riesgo de respuestas negativas de las colas superiores o tener que realizar modificaciones en los sistemas de iluminación superiores.

Los estudios apoyan esta tendencia en iluminación

Uno de los primeros en estudiar este campo intermedio de la iluminación hortícola fue la multinacional holandesa Philips. Más de cinco años de investigación sobre estrategias de iluminación en el cultivo de cannabis han proporcionado a Philips y a sus clientes conocimientos e ideas útiles. Por ejemplo, los niveles de luz extremos sobre el cultivo (1.500 – 2.000 μmol/m2/s de iluminación superior) generan costes de energía más altos, pero no siempre producen los mayores rendimientos esperados. Y recientemente han confirmado que la iluminación entre el dosel (ICL) agrega un gran valor, incluso con niveles de luz más bajos.

«Toda la planta se beneficia de esto. Después de varios ciclos de cultivo con diferentes variedades, determinamos que la ICL puede lograr un aumento de rendimiento promedio del 30 %. Como resultado del uso de lámparas LED ICL eficientes, el aumento de biomasa por kWh es uniforme y más alto.» afirman desde Philips.

La luz adicional entre el follaje lleva a un nivel superior la fotosíntesis en las partes inferiores de la planta. «Como resultado, hay más energía disponible para los brotes inferiores, lo que hace que se desarrollen con más fuerza. Sorprendentemente, aunque esperábamos que las inflorescencias inferiores se beneficiaran de las luces entre el dosel más bajas, las inflorescencias superiores también tuvieron un aumento significativo en el rendimiento en comparación al grupo de control. Esto se repitió sistemáticamente en varios ensayos”.

Las fotos a continuación ilustran el valor agregado de ICL para las inflorescencias principales y laterales en un tipo de cepa dominante de thc y CBD (sin ICL y con tratamiento con ICL en la misma imagen):

A pesar de las diferencias en el diseño de estas pruebas (intensidades de luz, espectros, relación entre la iluminación superior y la iluminación entre el dosel), los resultados fueron muy consistentes: la iluminación adicional intercalada entre el dosel da como resultado flores más pesadas y resistentes. También el rendimiento total (gramos de flores por m2) y el valor por unidad (precio por gramo) aumentan significativamente con la iluminación LED entre el dosel, exactamente lo que buscan los cultivadores de cannabis.

¿Más luz o mejor posicionada?

Pero, ¿el aumento en el rendimiento se debe a la aplicación de luz y energía adicionales o se debe a la posición de la luz en relación con la planta? Se han realizado también estudios para determinar el impacto de redistribuir el mismo DLI (misma cantidad de energía utilizada) entre la iluminación superior sola versus la aplicación combinada de iluminación superior más una luminaria envolvente entre el dosel.

Investigaciones realizadas por la empresa StateHouse Holdings demostraron que redistribuir una parte de la iluminación superior directamente a los lados de las plantas puede facilitar mayores rendimientos sin necesidad de utilizar energía adicional. Por ahora, los estudios están tratando de comprender cuál es el mejor despliegue de esta estrategia, ya sea en el dosel, debajo del dosel, algo intermedio… y si los beneficios son tan pronunciados cuando se trabaja con intensidades totales altas o bajas.

Otra pregunta que impulsa la investigación es si añadir iluminación entre el dosel ayudaría a reducir los costes del cultivo: si hay más desarrollo floral en las ramas inferiores, eso no solo aumenta el rendimiento y la calidad, sino que también reduce la cantidad de defoliación necesaria. Los primeros indicios muestran que las flores que se encuentran más abajo en el dosel son de una calidad más alta de lo normal y se produce menos desperdicio de poda.

De hecho, a partir de esta investigación y otros estudios, descubrieron que la iluminación entre el dosel puede ayudar a elevar el grado de clasificación de la flor en las ramas inferiores, lo que significa que los cogollos que se considerarían de clase B o C ahora son de grado B o A. Los cogollos simplemente tienen un valor de mercado más alto. En términos de calidad y consistencia, es muy buena noticia. Pero no solo se eleva la calidad de los cogollos, sino que la variabilidad entre el tamaño y la calidad de los cogollos… también se reduce significativamente.

Conclusión

Los sistemas de iluminación intercalada entre el dosel han demostrado ser una herramienta eficaz para los cultivadores que buscan mejorar los rendimientos y la calidad de las flores en las zonas inferiores de la planta, donde la luz suele ser insuficiente. Si eres un cultivador interesado en producir más cogollos de calidad superior y reducir el desperdicio de podas, la iluminación entre el dosel puede ser una gran incorporación a un cultivo de interior.

Con aumentos de rendimiento del 20% o más, estos sistemas se destacan como una opción excelente como iluminación complementaria, gracias a su diseño extremadamente eficiente. Y a medida que continúan los avances en la tecnología de iluminación hortícola, el viaje hacia la comprensión de las implicaciones y ventajas de la iluminación intercalada en el dosel promete ser una frontera apasionante.

Fotos cortesía de Cannabis Research Coalition y Philips