Cómo evitar y combatir la mosca blanca en tu cultivo de marihuana

El autocultivo de cannabis presenta muchos retos y uno de los más temidos es lidiar con las plagas, ya que pueden afectar e, incluso, arruinar cosechas enteras. Una de las más comunes es la mosca blanca, un insecto que, si bien no es el más letal para la marihuana, suele aparecer con frecuencia y puede afectar al desarrollo y producción de tus plantas. A continuación te explicamos cómo prevenir su aparición y también cómo eliminarla.

La mosca blanca, también conocida como mosca blanca de los invernaderos, es una especie de insecto homóptero de la familia Aleyrodidae y se instaló hace tiempo en el sector agrícola de frutas, hortalizas y plantas ornamentales, convirtiéndose en una molesta plaga. De hecho, es considerada como una de las plagas más importantes en la agricultura a nivel mundial, al disminuir más del 50 % de los rendimientos de las cosechas.

Con más de 1500 especies de mosca blanca conocidas, la Trialeurodes vaporariorum es una de las más frecuentes en el cultivo de cannabis y, si bien no resulta una plaga devastadora como podría ser la oruga del cogollo o la araña roja, no debe menospreciarse su capacidad para menguar significativamente el rendimiento de los cultivos de marihuana, tanto de interior como de exterior.

Estos pequeños insectos miden aproximadamente de 1 a 2 mm de longitud, su cuerpo es amarillento y tiene cuatro alas cubiertas de una especie de cera que en estado de reposo quedan de forma paralela al cuerpo del insecto. Se alimentan de la savia de las plantas mediante unas piezas bucales de perforación y succión. Esta plaga puede extenderse a gran velocidad, ya que las hembras son capaces de copular apenas 24 horas después de emerger de la fase de pupa y frecuentemente dejan sus huevos en el envés de las hojas de las plantas, pudiendo llegar a depositar entre 150 y 500 huevos.

El ciclo vital de la mosca blanca comprende los estadios de huevo, larva, pupa y adulto, y se completa en unos treinta días aproximadamente. Por ello, la prevención y la detección temprana de esta plaga serán cruciales para evitar que se extienda en el cultivo de cannabis y cause estragos.

¿Cómo prevenir la mosca blanca en el cultivo de marihuana?

La regla de oro de cualquier cannabicultor que se precie es la prevención, ya que solo así podremos evitar quebraderos de cabeza. No hay nada más desalentador que invertir tiempo y energía en el cultivo del cannabis para luego ver malogradas las cosechas por culpa de plagas, hongos o enfermedades.

Para evitar que esto suceda, aquí van unos consejos sencillos para mantener tu plantación de marihuana libre de mosca blanca:

• Inspecciona tus plantas de cannabis regularmente: la mosca blanca es fácil de detectar, especialmente en su etapa adulta, ya que aparecerá revoloteando alrededor de las plantas de marihuana. Además, no son demasiado veloces, con lo que no te será difícil verlas.
• Usa la asociación de cultivos: si tu cultivo de marihuana es en exterior, puedes plantar alrededor de él otras plantas como las caléndulas, los claveles chinos o la albahaca, que actuarán como repelente para la mosca blanca.
• Prevención con insecticidas biológicos: fumigar tus plantas de manera preventiva con una solución a base cola de caballo, con aceite de Neem o jabón potásico, puede ser muy útil. Recuerda que aunque sean insecticidas biológicos, si vas a hacer un uso exclusivamente preventivo, solo debes rociar tus plantas cuando estén en la fase vegetativa.
• Evita el exceso de nitrógeno en tu abonado: esto puede atraer a la mosca blanca.
• Ventilación adecuada: procura que el aire circule adecuadamente por tu cultivo de marihuana. Esta medida no solo te ayudará a prevenir la mosca blanca, sino que también evitará la aparición de hongos.
• Mantén unas condiciones de higiene rigurosas en tu cultivo para evitar introducir en él posibles contaminaciones.
• Usa trampas amarillas adhesivas para detectar la llegada de adultos voladores. Son muy útiles para determinar el grado de infestación.

¿Cómo identificar la mosca blanca en el cultivo de cannabis?

Detectar la mosca blanca en tus plantas de marihuana en una etapa temprana será crucial para preservar la salud de tu cultivo. Este insecto se ubica inicialmente en la parte más alta de las plantas y de ahí va desplazándose hacia abajo.

A medida que la plaga se extiende y hay más individuos alimentándose de la savia de las plantas de cannabis, se hacen más evidentes las señales, ya que afecta al vigor y a los niveles de clorofila. Los signos de que la mosca blanca se ha instalado en tu cultivo son:

• Moscas que salen volando torpemente al sacudir las plantas.
• Hojas con clorosis, amarillentas o secas.
• Aparición de melaza, un subproducto de su alimentación que segregan por el ano, que puede ser la puerta de entrada de hongos.
• Punteado traslúcido en las hojas, que son las marcas que deja la mosca blanca al succionar la savia.
• Polvo blanquecino en el envés de las hojas, así como en individuos adultos.

¿Qué daños produce la mosca blanca en los cultivos de cannabis?

La mosca blanca se alimenta succionando la savia de las plantas, lo que afecta significativamente a su salud. Si esta plaga aparece durante la etapa de crecimiento, puede ralentizar e incluso detener el desarrollo de la planta, provocando la pérdida de hojas en casos graves.

Durante la fase de floración, el ataque de esta plaga puede reducir la producción, el volumen y la calidad de los cogollos, así como retrasar su maduración. Por si esto fuera poco, las picaduras de la mosca blanca introducen toxinas en la planta, lo que puede actuar como vector para la entrada de hongos como el tizón y la negrilla. Y lo que es peor, pueden transmitir diversos virus perjudiciales para las plantas.

¿Cómo eliminar la mosca blanca?

Si ya es demasiado tarde para aplicar los métodos de prevención anteriormente mencionados y esta plaga ha infestado tu cultivo, una reacción rápida será esencial para que no se propague. Los métodos de control utilizados en la actualidad para el control de dicha plaga en el sector agrícola se caracterizan por la aplicación frecuente de insecticidas sintéticos, lo cual ha provocado el desarrollo de resistencia a los mismos. Por eso, para lograr un cultivo de marihuana lo más orgánico posible, te recomendamos:

• Introduce especies depredadoras: la avispa parasitaria Encarsia formosa, por ejemplo, es altamente efectiva; así como también lo es el ácaro depredador Amblyseius swirskii y el insecto heteróptero de la familia Miridae llamado Macrolophus caliginosus, que con su voraz apetito, acaba no solo con la mosca blanca, sino que también puede ser efectivo contra la araña roja.
• Coloca trampas adhesivas amarillas, estas atraerán a la mosca blanca cuando vuele alrededor de la planta y quedarán pegadas en ellas.
• Elimina manualmente las larvas y huevos que encontrarás en el envés de las hojas con un algodón mojado con algún insecticida biológico. Los huevos son de color amarillo pálido, aunque van cambiando de color hasta alcanzar un tono verdoso antes de que nazca la larva.
• Pulveriza insecticidas biológicos: Aceite de Neem (que tiene efectos antialimentarios, al inhibir el crecimiento e intervenir en los procesos endocrinos), Pelitre o jabón potásico de manera persistente.

La mosca blanca puede presentar un desafío para aquellos que se aventuran en el bello arte del autocultivo de cannabis. La implementación de medidas preventivas, así como la eliminación adecuada de esta plaga, puede marcar la diferencia entre una cosecha pobre y una repleta de aromáticas flores. Ahora que ya conoces todos los trucos para mantener a raya esta plaga, ¡Solo te falta germinar nuestras poderosas semillas de marihuana!